¿Has oído hablar alguna vez hablar sobre la autofagia? Para resumirlo en pocas palabras, es un proceso de autodestrucción y regeneración celular.
Autofagia ¿Qué es? y en qué consiste.
Las células de nuestro organismo tienen la capacidad de auto-destruirse. Todo do elemento que nuestra célula necesita desechar es recolectado y enviado los lisosomas.
Los lisosomas, serán los encargados de reconvertir este material de desecho en moléculas y células totalmente regeneradas, capaces de realizar sus funciones correctamente de nuevo. Estos, contienen encimas, donde las bacterias y los materiales de deshecho se destruyen.
Los lisosomas fueron descubiertos por Christian de Duve, descubrimiento por el cual fue galardonado por el Premio Novel de Medicina en 1974.
El concepto autofagia, significa alimentarse de uno mismo.
La autofagia es un proceso esencial para la renovación de nuestras células. La célula puede destruir su propio tejido y encerrarlo en unas membranas. Este material será desplazado al lisosoma para su degradación.
Mediante este proceso, a nivel celular, el organismo es capaz de separar los elementos no funcionales para reconstruirlos. La autofagia es muy importante para poder eliminar y deshacernos de estos deshechos biológicos. A estos desechos biológicos, los conocemos como los radicales libres.
Una ausencia de estos elementos tóxicos, nos otorga un buen estado del organismo. Mantendremos un fuerte sistema inmune y fomentará la longevidad de nuestra vida. Por este motivo a la autofagia también se la conoce como la fuente de la eterna juventud.
El ayuno y la autofagia.
Es un proceso que se activa tras un tiempo sin ingerir ningún tipo de alimento. Es decir, la alcanzaremos tras un periodo de ayuno.
Tras un tiempo expuestos al ayuno, nuestro cuerpo empezara a utilizar sus reservas para auto alimentarse. Por lo tanto, cuanto más tiempo estemos en ayuno, más tiempo expondremos al organismo a este proceso de depuración y limpieza.
Actualmente, conocemos variedad de modos de realizar este proceso, en cuanto a las horas de ayuno y frecuencia en cuanto días se refiere. Aunque, las tres opciones más realizadas son las siguientes:
Alta frecuencia y corta duración: Consistiría en aguantar 16 horas en ayuno y realizarlo a diario o varios días por semana.
Frecuencia y duración media: En este caso sería en estar 24 horas ayunando y realizar este proceso una vez por semana.
Baja frecuencia y alta duración: El proceso de ayuno se alargara varios días (2-3) y se realizaría una o un par de veces al mes.
La autofagia y sus propiedades.
Exponer el organismo a este proceso de “autolimpoeza” nos aportará multitud de beneficios y propiedades que no deberíamos dejar pasar.
Nos ayudaría en la prevención de ciertas enfermedades. Gozaríamos de un sistema inmunitario mas fuerte. Gracias a la destrucción de los radicales libres y elementos residuales nuestro cuerpo estará menos expuesto a elementos nocivos.
También, ayuda a prevenir la diabetes 2 y enfermedades relacionadas. Reduciremos los picos altos de insulina, evitando estados de hiper e hipoglucemias.
Nuestro sistema nervioso gozará de un estado óptimo. Evitaremos enfermedades neurodegenerativas causadas por la acumulación de sustancias de desecho en nuestro cerebro.
Reduciremos las posibilidades de desarrollar tumores o padecer cáncer. El proceso de autofagia fortalece las células que gozan de buena salud y ayuda a destruir las que pueden causar daño a nuestro organismo.
Reduce tus niveles de grasa corporal.
Además, este proceso también puede ser muy beneficiosa para personas que necesiten reducir sus niveles de grasa corporal. El estar un tiempo prolongado en ayuno, va a favorecer a una utilización de la energía a partir de nuestras reservas.
Mantener un déficit calórico y comiendo la suficiente proteína en las horas de no ayuno lograremos este proceso de bajada de grasa. La proteína nos ayudará a mantener y regenerar nuestra masa muscular y el balance de calorías negativo fomenta una notable quema de tejido adiposo.
El estudio de la autofagia ha causado una nueva obtención del Premio Novel de medicina en 2016. El galardonado con este premio fue Yoshinori Ohsumi. Quién amplió los estudios realizados en los años anteriores, profundizando en sus procesos y mecanismos.